La Compañía G tuvo un día tranquilo. Se sirvieron comidas calientes. Algunos de los hombres pensaron que tal vez los chinos se habían retirado. Esa esperanza desapareció poco después del anochecer. Primero, aparecieron bengalas en los cielos del sur; luego siguió el sonido de las cornetas.

Después de una media hora o más, mientras los hombres de la Compañía G esperaban tensos en sus pozos, un pequeño grupo enemigo abrió fuego contra la ametralladora en el centro de la sección del Teniente McGee, hiriendo al artillero. La noche anterior el enemigo había abierto el combate disparando sobre la ametralladora. Un grupo de chinos de tamaño de escuadra estaba tratando de alcanzar el arma del Cabo Ottesen trabajando a lo largo del espolón que conectaba la colina de la 3.ª Sección con la colina 397 del enemigo al sur. Una ametralladora enemiga disparó por encima de la cobertura de la pequeña fuerza. Las bengalas enemigas estallaron frente a la compañía, y los disparos se convirtieron rápidamente en una furiosa y ruidosa lucha con los impulsos enemigos más fuertes aparentemente dirigidos al centro del 3.ª Sección y al collado entre éste y el 1.ª Sección. Las balas trazadoras se arqueaban sobre la posición de los cañones de la artillería.