Hubo tres redes británicas trabajando en Francia. La primera se llamaba Buckmaster, por el apellido de su jefe, y estaba especializada en las acciones de sabotaje; la segunda, que operaba con el nombre en clave Alibi, tenía como objetivo ayudar a recuperar y reenviar a Inglaterra a los pilotos derribados en Francia que aún no hubieran sido capturados por los alemanes o que hubieran conseguido evadirse. La tercera era Sosias, que se dedicaba tanto a la acción directa como a la obtención de información. Esta última red la dirigieron dos hermanos: Dominique Ponchardier en la zona ocupada, y Pierre Ponchardier en la zona libre.

Dominique, que era alférez de navío, operaba habitualmente junto con otras dos personas, el capitán de fragata Riviere y un veterano de nuestra guerra civil, un comunista militante conocido como Pepe, o Pistole, debido a su talento como tirador.
Dominique y Pepe tenían ya cierta experiencia, pues antes de crear la red Sosias habían actuado contra la Gestapo y contra los colaboracionistas, y en 1941 Pepe se había convertido en jefe de un grupo de la resistencia FTP (Franc-tireurs et Partisans), pero sin perder contacto con su colega, de modo que las acciones de sabotaje empezaron a multiplicarse por el norte de Francia, muriendo muchos alemanes.

Después de que un miembro de la resistencia llamado Jean Beaurin, de 20 años, que había participado en bastantes de estas acciones, fuera capturado, Ponchardier y Pepe decidieron hacer todo lo posible para liberarlo de la prisión de Amiens, donde se encontraba, a la espera de ser fusilado el 20 de febrero de 1944. Dado que en aquel momento la cárcel tenía a unos 700 presos, de los que 300 eran miembros de la resistencia, el objetivo pasó a ser liberarlos a todos.
Tras sopesar un asalto directo, que probablemente no hubiera funcionado, a Ponchardier se le ocurrió pedir ayuda a la RAF para que derribara con bombas los muros de la prisión. Dados los servicios que le había rendido la resistencia, sobre todo a la hora de rescatar pilotos y obtener información, la RAF aceptó. Después, sería tarea de los FTP liberar a los prisioneros. Se fijó el 15 de febrero como fecha para la operación, que recibió el nombre de Jericó.

Con un retraso de tres días debido al mal tiempo, finalmente despegaron los 18 bombarderos Mosquito del Ala 104 de la RAF, dirigidos por el group captain Charles Pickard. Ellos serían los encargados de abrir los muros. Bien preparados tras haber dedicado horas a estudiar una maqueta, eran las 12.01 horas de aquel 18 de febrero cuando los pilotos llegaron sobre su objetivo, soltando sus bombas a tan solo cuatro metros del suelo en un ataque tan osado con lleno de pericia.
La operación fue un éxito, pues no solo huyeron cientos de resistentes –entre ellos el joven Jean Beaurin– que en los meses posteriores iban a ayudar a identificar a muchos agentes encubiertos de la Gestapo, sino que además sirvió para que aquellos hombres supieran que podían contar con el apoyo de la RAF, lo que les dio mucha moral de cara a prepararse para el desembarco. Sin embargo era prácticamente inevitable que hubiera bajas. 85 franceses murieron durante el ataque, así como 20 alemanes; y entre los pilotos, no regresaron ni uno de los Mustang de escolta ni el Mosquito de Pickard.
Más información sobre la operación:
¡Felicidades!
extraordinario artículo y, al monos para mi, totalmente desconocido.
Por favor, ¿donde se puede encontrar un poco más de información?
saludos desde México
Buenas tardes Isaias.
Puede encontrar más información sobre este ataque en:
– The Jail Busters: The Secret Story of MI6, the French Resistance and Operation Jericho, por Robert Lyman.
– Mosquito: Menacing the Reich: Combat Action in the Twin-engine Wooden Wonder of World War II, por Martin Bowman.
– La France au Combat: de L’appel du 18 juin a la victoire, por François Broche y Jean-François Murraciole.
Un saludo.
mil gracias
saludos