Hubo muchos fiascos en la Segunda Guerra Mundial, pero a quien nadie igualó sin duda fue a Enzo Grossi, comandante de un submarino italiano que pretendía haber hundido dos acorazados estadounidenses en aguas del Atlántico sur, en 1942.
Recibió por ello la Medalla de Oro al Valor, de manos de Mussolini, y la Cruz de Caballero, por parte de Hitler. Grossi apareció varias veces en el noticiero nacionalsocialista, medio desnudo junto a su periscopio.