Ponemos hoy a la descarga en la sección de artículos GEHM un nuevo artículo de Pablo García Sánchez.
Chechenia es una pequeña república islámica perteneciente a la Federación Rusa, situada en la parte de Sur de esta y en el norte del Cáucaso. Limita con Stávropol al noroeste, la república de Daguestán al sureste y este, Georgia al sur, y las repúblicas autónomas de Ingusetia y Osetia del Norte hacia el oeste. El símbolo nacional de los chechenos es el lobo (elemento que llegó a estar presente en la bandera de la fugaz República Chechena de Ichkeria), animal con el que se identifican en varios aspectos. El lobo es un animal tanto solitario, como miembro de una manada; se caracteriza por su coraje, su espíritu depredador y su amor por la libertad. Estas son características con las que se identifica el pueblo checheno, un pueblo organizado por clanes, con un gran respeto por la sabiduría de los mayores y con una cultura compartida basada en la tradición, un fuerte sentido del honor y un espíritu independiente y aventurero.
Por lo general el Cáucaso, y más concretamente la parte norte perteneciente a Rusia, está formado por un complejo mosaico de pueblos y religiones muy diversas. Así, existen tres grupos étnico‐lingüísticos principales (indoeuropeos, caucásicos y altaicos), y dos religiones mayoritarias (cristiano‐ortodoxa e islámica), con muy diversas combinaciones en cada territorio (Ruíz González, F.J., 2010, pág. 1).
Aunque habían existido anteriormente relaciones entre los chechenos y Rusia, no será hasta el siglo XVIII (con la expansión hacia el Cáucaso ejercida por el zar Pedro I el Grande) cuando comiencen realmente los primeros choques entre ambos pueblos. Durante el siglo XIX (en el contexto de la rivalidad con el Irán Safávida y el Imperio Otomano) Rusia anexionó Georgia en el 1801, pero la necesidad de asegurar las rutas hacia su nueva posesión le llevó a anexionar Chechenia.
La tarea recayó inicialmente sobre el general Yermolov, quien comenzó una práctica de brutalidad para subyugar a los chechenos, construyendo puestos fortificados por toda la región para controlar el territorio (siendo este el origen de la ciudad de Grozni, fundada en 1818 para controlar las tierras centrales). La idea era ejercer presión sobre los chechenos para que se desplazasen a las zonas altas montañosas y traer población principalmente cosaca que repoblase las áreas ocupadas. A pesar de la fiera resistencia ejercida por los chechenos y de las continuas rebeliones, finalmente los chechenos no pudieron resistir ante el incomparable poder ruso. El gran despliegue de tropas y las brutales medidas de conquista acabaron dando lugar a que en 1859 Chechenia fuese formalmente anexionada al Imperio Ruso.
Sin embargo, la zona nunca consiguió ser del todo pacificada y constantemente se dieron sublevaciones en contra del dominio ruso. Con el estallido en 1917 de la Revolución Rusa y con la caída del zar, los chechenos pensaban que su suerte habría de cambiar, pero la llegada de los bolcheviques al poder no supuso en absoluto su independencia. A partir de entonces, la historia de Chechenia se caracterizó por los continuos cambios político-administrativos dentro de la URSS a los que estuvo sometida: inicialmente en el año 1921 se constituyó Chechenia como parte de la República Autónoma Socialista Soviética de las Montañas (Gorsky ASSR), que agrupaba varias nacionalidades del Cáucaso. Posteriormente esta deshizo en 1924 en varias regiones y distritos administrativos, y Chechenia pasó a ser una Región Autónoma (Oblast). Sin embargo, en 1934, para mejorar la eficacia de la administración y para reforzar la autoridad del poder central Stalin decidió juntar a chechenos e ingusetios y crear la República Autónoma de Chechenia- Ingushetia.
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